La idea no es nueva en nuestra sección. Ya casi está creando carta de ciudadanía en el elenco de “buenas prácticas”, es decir, de “buenas tradiciones”. El Equipo de Pastoral de ESO propuso un año más esta hermosa iniciativa y decidió llevarla adelante. También los alumnos mayores de 4º de ESO han salido del aula para colaborar en la compra de los churros y las porras y colocar el “istalache”, o sea, el montaje del chiringuito.
El precio era de 2 euros, y han participado la mayor parte de los alumnos y profesores de la ESO, que fueron bajando del aula escalonadamente para una buena organización del reparto. En total, 290 personas: 50 profesores, 7 del personal de administración y servicios y el resto, de alumnos. Pero también se han añadido algunos profes de otras secciones de Formación Profesional, de Primaria y de Infantil.
Ahí lo tenemos: “Solidaridad a flor de piel”. Es el espíritu de la Navidad que se contagia. El espíritu de la Navidad es Dios mismo que se hace solidario con el ser humano, y se hace hombre, como nosotros, para salvarnos. Desde entonces, “la solidaridad” ha tomado “carta de ciudadanía” en nuestra tierra, y mucha gente de buena voluntad, por doquier, hace hermosos gestos de solidaridad, allí donde más se necesita. No basta, es cierto; pero esa antorcha que se enciende en todos estos gestos de solidaridad, sumada a otros muchos gestos que se dan por todo el mundo, pueden llegar a formar una hoguera imponente de amor, que “mueve y conmueve”, en la lucha contra el egoísmo instalado en el corazón del ser humano.